En el mundo rural en verano, el trabajo y el ocio en el taller ocupacional funcionan de diferente manera al de la ciudad. Hay que aprovechar el trabajo extra, que a veces es superior al de otras épocas… para disfrutar, adaptarse a las posibilidades que te ofrece el medio y unir las dos facetas de la jornada.
Ya habíamos programado realizar actividades de orientación camino a la huerta, ejercicios de memoria en actividades lúdicas en el césped del río, ejercicios físicos a través de juegos al aire libre y hemos comenzado plantando flores en la piscina municipal, aprovechando la creatividad y habilidad laboral y luego… baño en la piscina, hemos sido cinco los valientes, los que tenemos siempre a mano un bañador “por si las moscas”, los que hemos eludido las nubes y hemos estrenado e inaugurado la piscina municipal de Navaluenga del verano 2017.
Quizás vayamos otra vez, pues nos invita el Ayuntamiento, tal vez después de quitar hierba, un rato en la huerta o leer un rato el libro estival que elegimos y que nos ayudará a converger con otros tantos mundos… en fin que el verano se nos presenta distinto y con buenas propuestas.